Si es un potro, no es nada anormal lo que te está haciendo, ellos aprenden a defenderse, por eso se dice que los tienes que domar dos veces. Empieza por bajarle la cara y empujarlo hacia adelante con las piernas, sin la fusta, si se te vuelve... a poner de manos, vuelvele a bajar la cara. Tu caballo es reacio a trabajar, por lo que se decuce que es vago. Tienes que convencerlo que para el es más esfuerzo y se cansa más defiendose que trabajando, por lo tanto se suave a la hora de engañarlo. Forma: para bajarle la cara, empieza a jugar con el filete (obligatorio), de derecha a izquierda (notando que se le mueve en la boca), él, poco a poco irá bajandote la cara. Si no te anda, necesitaras ayuda exterior que te lo empuje. Cuando consigas que ande con la cara abajo, acaricialo mucho, luego lo haces al trote y que el ayudante se separe poco a poco, hasta que consigas hacerlo solo con la ayuda de tus piernas.